Antes de que te decidas a hacer un video sobre tu empresa, debes decidir qué camino vas a tomar, si será animado o será filmado. Para eso debes tener en cuenta a quién va dirigido, cuanto va a costar y el tiempo.

 

Una vez que sabes cuál es el mensaje que vas a transmitir, es momento de analizar tu público. Ésta parte es muy importante ya que definirá la credibilidad en el espectador. El estilo tendrá un diferente impacto en diferentes audiencias, si vas a niños y adultos jóvenes, el video animado es muy buena opción. Pero, si vas a personas orientadas a negocios, un video animado podrá parecer muy infantil y será difícil de ser tomado en serio.

 

Cuando se realizan videos con personajes reales, tienes la facilidad de agregar el factor humano, los mensajes no verbales como las expresiones faciales, las cuales incluso comunican más que las palabras mismas. El observar los ojos nos brinda mayor sensación de seguridad, calidez, identificación y credibilidad, pues somos seres sociales, así fuimos creados. El éxito de facebook en eso se basa, es un catálogo de rostros.

 

Todos tenemos acceso a teléfonos que graban video, es lógico pensar que eso es todo lo que necesitas. No exactamente, si crees que es solo grabar y editar, deberías tomar en cuenta contratar a una empresa especializada para lograr crear ese factor diferenciador con calidad.

 

Para animación necesitarás software especializado y conocimiento, pero podrías hacerlo si tienes el tiempo, pues toma mucho más tiempo que la producción de video en vivo. Al igual que el video en vivo, puedes contratarlo.

 

Pensar que la animación es más barato, piénsalo dos veces, pues involucra mucho tiempo que se traduce en dinero, mientras que el video en vivo toma cuando mucho dos días en producción.

 

Obviamente la flexibilidad en la animación es mayor, ya que si se necesita cambios, es más fácil realizarlos en post-producción que volver a organizar de nuevo a todas las personas involucradas. Otro aspecto a favor de la animación, es que es un medio ideal para transmitir conceptos muy abstractos.

 

Usualmente propongo realizar un híbrido entre ambas técnicas para aprovechar la ventajas de un estilo y sanar las desventajas del otro, así se complementarán y su resultado será sinérgico, obviamente requiere mayor trabajo, pero los resultados serán los óptimos. Ya dependiendo de la audiencia y el objetivo, tendrá más peso la filmación o la animación.